La Preexsitencia de Cristo

Otro de los pasajes-enseñanzas de la Biblia, que hay que poner sobre la mesa, para que la criatura-hombre vallamos abriendo el entendimiento, Lucas, 24,45, la palabra preexistencia, aparece en la Biblia, cómo algo que siempre existió-existe, y existirá, ¡claro¡ Dios, de siempre, y para siempre, cuando Dios, pensó de crear la creación esta donde vivimos-existimos, nunca pensó en la muerte-dejar de existir, ese acontecimiento de la muerte, fue como consecuencia de la desobediencia del hombre a Dios, ¿la muerte? ¿y porque? Génesis, 2,17, como comas del árbol ciertamente morirás, y una vez más tenemos que decir, (comió del árbol) ahora aguántate a las consecuencias, que no serán leves, sino muy graves mira que palabra más triste, mi padre murió en el año 1988, o mi pariente, “no se quien” murió en no sé qué fechas, y es ya cómo una palabra cultural, una educación, que esa sí que nos la tenemos que aprender. Pero después de todo el daño que está haciendo, la muerte en la criatura pecadora, desde el principio hasta el fin, la Biblia, dice que Dios, no es Dios, de muertos sino de vivos, Mateo,22,32, pero a pesar que ese fantasma de la muerte nos barre a todos ricos, pobres mayores jóvenes africanos americanos y europeos, todos los pueblos tienen su cementerio, Gracias a Dios, que en el cielo-gloria, allí no existe el cementerio, porque Cristo, está allí vivo, y los discípulos, lo vieron resucitados de los muertos, Lucas, 24,36, mientras ellos hablaban, Jesús se puso en medio de ellos, ya resucitado de los muertos, ¡bueno¡ ahí está el preexistente, que fue que es y que será para siempre, eso es lo que quiere decir la palabra preexistente, que aunque esa palabra no está en lo revelado-escrito, solamente está en el título, pero mira lo que dice ese vs, 51, y vamos a por ese vs, empezando por el 48. ¡Bueno¡ una vez que Jesús, se presenta aquí en este mundo, se presenta cómo el Hijo de Dios, y que viene a revelarnos-enseñarnos, que se puede vivir para siempre, ¡qué raro¡ ¿no? Cuando insistimos estamos ya educado mundialmente, que nacido crecido te haces viejo-mayor, y viene la muerte, y se terminó todo, (no) Él vino a enseñarnos qué no, y Él mismo se pone como ejemplo, cuando Él empieza a enseñar a lo que viene a este mundo, el pueblo que les rodeas se pone muy nervioso, entra en tención, no sabe para dónde mirar, pero lo que Él viene a enseñar, está ahí, está fuera de todos los propósitos de los hombres, está fuera de la cultura de los hombres, pero una cosa tendríamos que tener en cuenta los hombres, qué aunque lo que Él viene a enseñar, ni antes ni después nadie lo enseñó, eso, que el hombre nos gustaría de quitarnos de en medio, eso sigue estando ahí, nuestra preexistencia, y también, aunque, Él es preexistente desde la eternidad, y hasta la eternidad, por ejemplo, Juan, 17,5, la Gloria que tuvo con Él Padre antes que el mundo fuese, eso es preexistencia, la enseñanza, que a tantos predicadores se les está yendo por los aires, pero sí Él en su oración sacerdotal confiesa la Gloria que tuve contigo, ahora mirad de la forma que se le revela a Pedro, 1ª de Pedro, 1,20, ya destinado desde antes de la fundación del mundo, pero la Biblia, que yo tengo, y si la tengo es porque creo en ella, porque hay por ahí otras biblias, que ya no lo dicen así, Romanos, 9,5, vino Cristo, Él cual es Dios, sobre todas las cosas, bueno, testimonio más que suficiente, para reconocer y admitir, la preexistencia de Cristo, desde siempre, y para siempre, pero aunque Él es preexistente, desde el pasado, presente y futuro, nosotros los humanos solamente seremos preexistente, en presente y futuro, porque aunque ya estábamos en los planes-propósitos de Dios, desde antes de la fundación del mundo, no obstante, nuestra existencia, solamente es desde aquel momento, de Génesis, 1 26-27, y 2,7, hace un muñeco de barro, y le soplo, y vivió, y cuidado, vivió y vivimos, con la imagen-semejanza de Dios, para toda la eternidad, y porque Jesús, da estas enseñanzas, mirad como responde el pueblo, en ese Juan, 8,48, tú eres samaritanos, y tienes demonio, bueno en aquellos día los samaritanos estaban enemistado con los judíos, Juan, 4,9, no se trataban, y Lucas, 12,33, ahí se menciona el samaritano, como un extraño-extranjero, y por eso en Juan, 8,48, a Él lo señalan cómo samaritano, como consecuencia tienes demonios, ¡que ceguera espiritual, de Juan, 9,35-41, estos hombres, que supuestamente, tendrían que ser ejemplo, y tal cual el líder, tal cual sus seguidores, tienes demonio, claro, que en esta preexistencia de Cristo, Él mismo dirá otras cosas, que los otros Evangelios no las dicen, y que para los oyentes es un choque, dice Jesús, y claro en estas declaraciones se entiende, de que Jesús, vendría a enseñar el reino de Dios, y una vez que Él muriera, Él se iría con Él Padre otra vez y entonces Él Santo-Espíritu, se encargaría en aplicar la enseñanza, según Juan, 7,37-39, cuando Yo sea Glorificado, vendrá Él Santo-Espíritu, sobre todos lo que creyesen en Él, y Juan, 16,13-14, en eso consiste el Reino de Dios,, y seguimos pensando en esa preexistencia de Cristo, vs,49, honro a mi Padre, aunque los hombres digamos lo que digamos, y traduzcamos la Biblia, como la traduzcamos, lo cierto y verdad es que lo que enseñó Jesús, se cumplirá todo sobre la letra, y Él dice, yo honro a mí Padre, y como los hombres-criatura, deshonramos a Dios, con tantas actitudes, negativas, que Dios, se siente como aislado, lejos por parte del hombre, Efesios, 2,17, los lejos los gentiles, y los cerca los judíos, y mirad dice Jesús, que honro a mi Padre, y vosotros me deshonráis, si ya el hombre quedó desconectado de Dios, allí en el huerto, y Jesús, viene para volver a conectar, entonces es deshonrado Él Padre y Él Hijo, el que no honra al Hijo, no honra al Padre, Juan, 5,23, según la Biblia, Él Hijo Jesús, es uno con Él Padre, Juan, 10,30, o Romanos, 9,5, Cristo, es Dios, sobre todas las cosas, por eso preexiste desde la eternidad, y hasta la eternidad. Sigue diciendo en Juan, 8,50, Jesús, como hombre, quiere levantarnos los ojos Juan, 4,35, y Colosenses, 3,1-4, con esa mirada hacia arriba, honraríamos al Padre-Dios, igual que Él lo honró durante toda su vida, y dice 8,50, pero yo no busco mi gloria, mira que palabras salen por esa bendita boca, por eso, aquella mujer de en medio de la multitud, le tiene que decir, Lucas, 11,27, el vientre que te trajo y los senos que mamaste, y es que no era para menos cuando ahora estamos estudiando esa preexistencia de Cristo, tal como nos la deja el Apóstol Juan, ¡como Juan se tiene que dejar llevar por Él Santo-Espíritu, para poder escribir estas maravillas expresadas por la boca de Jesús, que tan directamente nos declara el Reino de Dios, no busco mi gloria, cuando se está en la gloria, se tiene poder para juzgar y denunciar, pero Jesús, a pesar de haber venido de la Gloria, Él no quiere abusar de su poder, y dice no busco mí gloria, lo que me estoy buscando es el Calvario, para ganar la Gloria para vosotros, dice Jesús, que hay quien la busca, y como si la encontrara, aquella persona bien posesionada en la sociedad, y se le llama que está en la gloria, y aquellos que no tienen trabajo, que están en el infierno, pero la Biblia, dice que ni la una cosa ni la otra, porque tanto la Gloria como el infierno, son dos lugares, que Jesús enseña que están los dos al otro lado, de la muerte del cuerpo, ahora creemos que Jesús, está en la Gloria, Romanos, 8,34, mientras que aquel rico de Lucas, 16,23, en tormento, ¿no dicen muchas gentes que con la muerte se deja de existir? Pregúntale al rico, y Jesús, dice yo no la busco, hay quien la busca y juzga, Jesús, quiere decir con esas palabras, que cuando se tiene el poder, se toma la libertad de juzgar y eso se ve en los jueces reconocidos en este mundo, la Gloria de Jesús, ya la tiene Él ganada, puesto que vino a este mundo desde allí, y volvería allí, por lo tanto en lugar de buscar la Gloria, buscaría a los pecadores, Lucas, 19,10, eso sí que busca y le preocupa mucho a Jesús, la situación de los pecadores, (que sí no naces de nuevo no entrarás en el Reino de Dios) eso era lo que buscaba Jesús, cuando Jesús, estuvo allí en el desierto, con el diablo, Mateo, 4,1-11, vs,8, todo esto te daré y la gloria de ellos, ahí tienes gloria, aprovéchate de ella, y Jesús dijo que no quería tanta gloria, sabría Jesús, que la oferta que el diablo le está ofreciendo, es incierta, toda esa gloria, un día dejará de ser, pero lo que prevalecerá será la Gloria de la que vino Jesús y a la que cuando terminó su servicio volvió allí otra vez Juan, 13,3. Y ahora querido lector-amigo-hermano, mira lo que dice, Juan, 8,51, ahí empieza con un garantizando sus enseñanzas, ya lo dijimos en alguna ocasión, y ahora, dándose las circunstancias de como Juan, registra la seguridad de lo que Jesús, enseña se cumplirá, y repite de cierto, te digo, y ahora sigue diciendo, en 51, el que guarda mi Palabra, sí la oyes, Romanos, 10,17, no la dejes para mañana porque Mañana, no es tuyo, Proverbios, 27,1, y esa es la estrategia del diablo, mañana, mañana te oiré, Hechos, 24,25, (que engaño) pensar del reino de Dios, para mañana, Jesús, dice, guarda la Palabra de Dios, y nunca veras muerte, se sale Jesús, de la razón humana, no entiende el hombre que, viendo como todos nacemos crecemos y nos hacemos viejos-mayores, y morimos, y se acabó todo, unos vienen y otros se van, y para siempre, pero Jesús, no piensa así, porque Él sabía lo que Él Padre le había revelado, Mateo, 11,25-27, pero lo que Él Padre le ha revelado, lo mismo está todavía encubierto para tantas gentes, 2ª de Corintios, 4,3-5, pero Jesús, lo tiene bastante claro, y los que hemos creído en Él, también lo tenemos bastante claro, el que guarda mí Palabra, nunca verá muerte, y como te lo crees, ¿lo entiendes? Que Él murió, y resucitó de los muertos y se presentó a los discípulos resucitado, y que delante de ellos, empezó a subir, Lucas, 24,51, querido hermano-predicador, no pierdas de vista este acontecimiento, que Jesús, dice que el que guarda su palabra nunca verá muerte, y eso vale más que todas las glorías que el diablo nos ofrezca aquí en este mundo, una cosa muy parecida es la que la Biblia, también nos deja en 2ª de Timoteo, 1,10, quitó la muerte, con su muerte, esa muerte que ahí se menciona que dice quitó la muerte, Pablo se ha puesto de acuerdo con Jesús, quitó la muerte del alma, esa idea de (se murió y ya se terminó todo) y nos sale Jesús, al encuentro de nuestros pensamientos, y nos dice, quitó la muerte del alma y sacó a luz, la vida del alma, Jesús, con su muerte nos quita ese velo que nos pone el diablo, para que el pecador-hombre, no vea que la Gloria está allí, para los que crean-nacidos de nuevos veamos la Gloria allí cómo la veía Jesús, que fue el primero en anunciar (me voy a la Gloria) mira cómo a Jesús, no lo engañaba el diablo, sigue diciendo Jesús, en su preexistencia, nunca verá muerte, bueno, Jesús, que tú también moriste, (sí) y resucitó de entre los muertos, cuando les doy testimonio a alguien de la resurrección de Jesucristo, cuantas gentes no quieren oír esta enseñanza del Evangelio, porque una de las enseñanzas es que el Santo-Espíritu, convence al mundo de pecados, Juan, 16,8 y cuando el Espíritu-Santo empieza a obrar, entonces es cuando el pecador, se siente redargüido y es la obra de Dios, a través del Espíritu, que empieza a convencer, pero lo cierto y verdad, es que Jesús, nos sale al encuentro con esa palabra, el que oye y recibe y vive la Palabra de Dios, tendremos que pasar por la experiencia de separar el cuerpo del alma, y no sabemos cuándo será, y quizás he incluso al rey Ezequías de Isaías, 38, Dios, le dice, prepara tú casa porque morirás y no vivirás, y dice allí que Dios, le dijo a Ezequías, te alargaré la vida quince años, pero que a la corta o a la larga la paga de pecado es esta muerte del cuerpo, y sí esa muerte del cuerpo ya la tuvo que probar Cristo, sin culpa ninguna, nosotros, toda la humanidad desde Adán, por comer de aquel árbol del que se le dijo no comas, y comió, la muerte, que aunque allí el hombre siguió viviendo en el cuerpo no obstante la muerte primera que allí se produce es la desconexión de la criatura-Creador, porque si Dios, le había dado la vida, Génesis, 2,7, una vez que el hombre ha desobedecido, se desconecta del Creador y pierde la vida, queda vivo para la carne-cuerpo, pero que en esa carne cuerpo cuando llega la hora de pagar por el pecado, para el hombre se terminó todo, pero para Dios, no, dice la Biblia, que cuando el hombre desobedeció a Dios, siguió viviendo, pero Dios, los echó fuera del huerto, figura de muerte-condenación, y cuando el hombre muere hoy, no es que se termine todo, sino que en la eternidad, estarán echados fuera de la Gloria, y de esa enseñanza está el NT, lleno, pero Jesús, nos garantiza de que el que guarda su palabra, nunca verá muerte, y mira lo que le dice Jesús, al pueblo en Juan, 5,40, y no queréis venir a mí para que tengáis vida, querido hermano-lector, ¿has probado-vivido esta vida que aquí menciona Jesús? O la que menciona en Juan, 5,21, lo mismo que Él Padre levanta a los muertos y les da vida, ¿es posible que Dios, levante a los muertos? Mira lo que dice en Efesios, 2,1 o en Colosenses, 2,13-14, nos dio vida, y yo querido lector, ahora cumplo cuarenta y cuatro años, desde aquel diez de Diciembre de mil novecientos setenta, Jesús, en un acto de arrepentimiento por mi parte, me inyectó la vida, la vida de Dios, Efesios, 4,18, y eso es verdad, por lo menos para mí, el que escribe este artículo sobre la preexistencia de Cristo, y a lo que Jesús, nos lleva ahí de que nunca verá muerte, es la muerte del alma, cuando Jesús, nos inyecta la vida en ese acto de arrepentimiento por nuestra parte, la vida del alma, y si nuestra alma no tiene vida, mira lo que dice la Biblia, al respecto dice que cuando ellos le reconocieron les abrió el entendimiento, para que comprendiesen, Lucas, 24,45, porque antes de esa inyección el hombre está como dice el salmista, salmos,32,9, como diciendo, cuando el alma está desconectada del Creador, somos como las bestias de carga, pero gracias a que en su día vino Jesús, a este mundo, y no solamente nos enseña a que busquemos el Reino de Dios, sino que muere por los pecadores, para que con su muerte nos da la vida de Dios, Efesios, 4,18, y en ese mismo vs, dice, teniendo el entendimiento entenebrecido, que enfermedad tan grave, siguiendo valorando que todo esto lo arregla Dios, por su Espíritu, en respuesta-como consecuencia de la muerte de su Hijo, por los pecadores, está enseñando al pueblo y a la criatura de algo que nadie pudo ni ha podido enseñar, en toda la historia de la humanidad, el Reino de Dios, entonces los oyentes se encuentran tan presionado que le repiten lo del vs 48, tienes demonio, vs,52, y los oyentes de Jesús, le acusan de que, Abraham murió, ¡claro¡ Jesús, también murió, pero ahora lo que Jesús, quiere enseñarnos, es que y ¿después qué? Eso es por lo que Jesús, se sacrificó para enseñar, no en teoría sino en práctica, no anda ves y lo haces tú, sino que Él se puso como ejemplo, a que el hombre, piense que los valores están allí, en la gloria, le dicen el pueblo que Abraham murió, y los profetas, de ese Abraham dice Jesús, enseñando en cuanto nuestra instancia allí, Lázaro estaba en el seno de Abraham, Lucas, 16,22, allí está el seno de Abraham, que Jesús, en aquella ocasión lo usa cómo figura, del Reino de Dios, mira como le responde el pueblo, mientras que Él dice en vs, 51, no verá, ahora le responde el pueblo, ¿dices tú, nunca sufrirá? La muerte, seguimos diciendo que es un fantasma para el hombre, nos da miedo de la muerte, y ¿porque miedo a la muerte? Sí porque no sabemos lo que nos espera después, porque sí supiésemos lo que nos espera después, y que será mucho mejor, para aquellos que creemos, 2ª de Corintios, 5,8, y Filipenses, 1,21, querido, con la experiencia-cultura-tradición-costumbre, y no sé cuántas cosas más, que la humanidad tenemos y practicamos, cuando Jesús, viene a este mundo y nos enseña del Reino de Dios, para muchas gentes estas enseñanzas son locura, Hechos, 26,24, y 1ª de Corintios, 1,18, locura, y sí es que es muy fuerte, que se salga del círculo vicioso, el cambio que Jesús, le da a la humanidad, es como si hoy te encuentras con alguien, y te dice que el otro día vio un burro volando algo parecido, y ahora que nos tengamos que creer, lo que Jesús, enseñó, y lo que Él enseñó es tan real, como la vida misma, y si la vida es real, ¿Qué me dices de la muerte? Es real también, bueno, pues por esto sería de sabio que el hombre apostase, las evidencias están claras que un buen porcentaje de gentes, ni lo creen ni lo valora, pero ojo, que porque el hombre-criatura, no crea que lo que Él vino a enseñar sea verdad, eso no se va a cumplir, que eso no esté allí, eso está allí tan seguro como que estaba allí, y está la tierra que Dios, le dijo a Abraham, vete de tu tierra y parentela, a la tierra que yo te mostraré y Abraham se fue por la fe, y esa tierra estaba allí, en Juan, 8,51, Jesús, le habla de no (ver), en el vs, 52, ellos hablan de no (sufrir) y esa diferencia es la que hay en el concepto de cómo ve Jesús, la vida y la muerte, y como la vemos los hombres, Él lo veía muy claro y nosotros lo vemos muy oscuro, pero haber cómo se cumplirá como lo entendemos los hombres o como lo enseñó Él, sigue diciendo el vs, 53,¿ Eres tu mayor que nuestro padre Abraham? Otra enseñanza que se nos escapa a los hombres, el pueblo-hombre, no descubrimos que Él es el Emanuel, Dios con nosotros, Mateo, 1,23, sí Él es Dios, que viene a este mundo de una forma totalmente diferente, y que viene de Dios, todo esto da a entender que Él es Dios, y que Él ya estaba con Él Padre cuando Él Padre estaba Creando, o seas ciertamente, Jesús, era mayor que Abraham, porque ahí se manifiesta su Preexistencia, pero ahora mira para el futuro y según el Evangelio, Él ya está sentado a la Diestra del Padre, Mateo, 26,64, Romanos, 8,34, 1ª de Pedro, 3,22, bueno, son textos-enseñanzas de la Biblia, que a los hombres se nos escapan, inclusos a muchos predicadores modernos de teología, y seguimos hacia adelante con esta maravillosa Preexistencia de Cristo, en es vs,53 se repite la idea de sufrir, y sigue diciendo, Abraham murió, pero el detalle, quiso ver mi día y lo vio y se gozó, pero creo que debemos volver al vs,53, que termina, con ¿Quién te haces a ti mismo? Y ahora mira lo que dice, en Juan, 5,19, el Hijo no hacer nada, el Hijo es el instrumento visible que Él Padre está usando para llevar a cabo sus propósitos, cuando Moisés, va a Egipto, no va por su cuenta propia, sino que él es el enviado por Dios, para que cumpla exactamente lo que Dios, le ha encomendado, no que haga las cosa, cómo las quería hacer antes de salir de Egipto, Moisés, tú hará todas las cosa exactamente cómo yo te diga, y Jesús, como hombre se sometió al Padre en obediencia, y por eso enseñaba lo que enseñaba, y sus enseñanzas son verdaderas, Jesús, sabía que si Él hacia las cosas como él quisiera, Él Padre, no respondería, y por eso seguimos diciendo, que hoy la iglesia de Occidente ni habla nada ni hace nada puesto que lo que, (ir a las reuniones y que el pastor tenga el sermón preparado) y si alguien nos dice algo desagradable, ya le estaremos señalando como el pueblo señaló a Moisés, allí en el desierto, Números, 21, 4-8. Juan, 8,54, si yo me glorifico a mí mismo, Jesús, está diciendo como, Dios, le advierte a aquel pueblo cuando va a entrar en la tierra prometida, Deuteronomio, 8,16-17,(17) y digas en tú corazón, Mi poder y la fuerza de mi mano, y llegó un día , una vez introducido el pueblo, en la tierra prometida, que ellos se creyeron, que lo que se habían encontrado, era de su propia cosecha, pero Jesús, dice yo no muevo un dedo, sin la autorización de mi Padre, para que cuando yo le diga a algún paralítico levántate y anda, que como eso viene de parte del Padre, eso se cumplirá, mi gloria nada es, ¿cómo es que tu gloria no es nada? No pierdas de vista que Jesús, se pone a las altura del pueblo, y habla como hombre, en Jesús, tenemos que ver las dos naturalezas la divina y la humana, y Él está hablando en esa naturaleza humana, su gloria humana, no es nada mi gloria, pensemos que cuando Jesús está en el desierto, Mateo, 4, el diablo le ofrece todas las glorias del mundo, ¡claro¡ como hoy haríamos tantos religiosos e incluso “cristianos” si el diablo me ofrece, yo lo cojo, porque cómo se suele decir a nadie le amarga un dulce, si vienen las glorias de este mundo pues al bolsillo, pero Jesús, dijo que no, que Él la gloria que recibiría sería la del Padre, y ¿Cuál es la Gloria del Padre? Dónde Él está sentado ahora, arriba, y ahora mira lo que sigue diciendo la Biblia, cuantas gentes, que vino la gloria de algún sitio, cuantos juegos al azar hay hoy en el mundo muchos, y en todos esos juegos el hombre no busca otra cosa sino las glorias, busca el poder tener los bienes adquiridos en tres bancos diferentes, y cuando esa gloria llegare, nos haríamos el mismo planteamiento que se hizo aquel de la parábola del rico insensato, muchos bienes tienes para muchos años come y bebe, Lucas, 12,13-21, mira esta noche vienen a pedir tú alma, y todas las glorias que has provisto, ¿de quién será? Por eso Jesús, tiene que decir y con toda la razón, mi gloria nada es, y mira lo que sigue diciendo ese vs,54, mi Padre es el que me glorifica, querido lector, ¿te das cuentas de la preexistencia de Cristo, (que poco se afana Jesús, por las glorias de este mundo) bueno, Él iba a morir joven, y ¿para qué quería las glorias de este mundo? Supongamos que Jesús, que tiene todo el poder, Él se hubiera propuesto, de, diablo esas glorias que tú me ofreces son creación de Dios, mi Padre, y cómo tal yo no te las recibo, sino que te las quitos, como te voy a quitar los pecadores, y Jesús, se hace dueño de todo este mundo, y ¿de qué le hubiera servido? Si admite las glorias de este mundo, ya no hubiera subido a la Gloria del Padre, Juan, 17,5, mi Padre es el que me glorifica, es el que perdona, y ahora, como se suele decir (el pez que se muerde la cola) mi Padre es el que justifica Romanos, 5,1, Dios, santificación en Cristo. Sigue diciendo en vs,55, pero vosotros no le conocéis, nos dice Jesús, de conocer a Dios, ¿Qué dice la Biblia, de esto? Que la criatura vuelva al Creador, lo mismo que allí al principio, en el huerto, dice la Biblia, que el hombre lo tenía todo, ¡claro¡ allí no había tanta tecnología como hay hoy, pero la criatura estaba en perfecta comunión con Él Creador, pero Jesús, con su muerte, quiere ganar todo aquello que se perdió, en el huerto, y dice vamos a volver a las sendas antiguas de Jeremías, 6,16, ¿Cómo conoceremos a Dios, Él Padre? Mira lo que le dice Jesús, a Tomás, en Juan, 14,7, se trata de conocerle a Él, sigue diciendo Jesús, yo me voy, y vendrá Él Espíritu-Santo, y ese Espíritu-Santo, Dios, lo enviará a vuestros corazones, Gálatas, 6,6, ya lo tenemos, Dios, viene a morar y obrar en nuestros corazones, por su Espíritu, ya conocemos a Dios, (claro) que no le conocemos como yo conozco a mi esposa o a mis hijos o al vecino, pero Dios, está en mi corazón por su Espíritu, por eso Jesús, le dice a los discípulos, (si me conocieseis a mí, también a mi Padre conocerías) es lo que Jesús, le está diciendo al pueblo allí, en Juan, 8,55, vosotros no le conocéis, pero yo le conozco, ¡claro¡ Jesús, vino de Dios, Juan, 1,18, nadie ha visto jamás a Dios, excepto, Él Hijo, ¡claro¡ Él salió del seno del Padre, pero y el hombre-mujer, ¿de dónde salió? De las manos de Dios, Hagamos al hombre, a nuestra imagen conforme a nuestra semejanza, ahí lo tiene, Dios, sopló y le dio vida, Génesis, 1,26 y 2,7, ahora Jesús, nos invita a conocer a Dios, qué mientras que el hombre estemos en el pecado, no lo conoceremos, el pecado ofende a Dios, Romanos, 8,7, y Santiago, 4,4, vosotros, no le conocéis, pero yo le conozco, nos dice Jesús, en Juan, 8,55, Yo le conozco, y las pruebas, es que os doy testimonio de Él, porque ¡claro¡ yo podría dar testimonio de que América existe, pero yo nunca estuve en América, pero Jesús, vino-salió de Dios, y a Dios, se fue otra vez, Juan, 13,3, por eso Él puede dar tan claro testimonio de Dios, porque Dios, ya le había revelado, Mateo, 11,25-27, que ese lugar de dónde Él salió está allí, (se puede conocer a Dios,) Dios, quiere hacer las pasé-reconciliarse, contigo, y ahora sigue diciendo, Juan, 8,55, le conozco, y si dijere que no le conozco, mentiría como vosotros, lo que Jesús, les está aclarando a los que le oyen, es que ellos son mentirosos, ¿Por qué mentirosos? Porque decís que vuestro padre es Dios, Juan, 8,41, bueno, si vuestro padre fuera Dios, me creeríais a mí también, porque os estoy dando testimonio que el que Dios, os tenia prometido desde el principio, soy Yo, pero ahora me queréis matar, como lo hicieron, y Jesús, termina el vs, 55, con le conozco y guardo su Palabra, claro, es dónde Dios, se agrada del hombre, cuando el hombre lea la Biblia, y viva según enseña ella, y verá como entonces darás testimonio que Dios, existe, y que es galardonador para aquellos que le buscan. Y vamos a ver ese vs,56, de que Abraham se gozó que ya dijimos algo, en vs, anteriores, pero detengámonos en eso que dice Jesús, que Abraham vuestro padre, se gozó de que había de ver mi día, ¿Qué quiere decir Jesús, con esto, bueno que si Dios, le había prometido, a Abraham que en su simiente serian benditas todas la familias de la tierra, Génesis, 12,3, y mira lo que Dios, le sigue prometiendo a Abraham. Génesis, 15,13, tu descendencia, oprimida, ahí hay mucho que pensar, en el sentido, de que ahí estamos toda la humanidad de todos los tiempos, involucrado, y que Dios, le reveló a Abraham, que de su simiente empezando por Isaac, llegaría un día a nacer enseñar y morir, Jesús, y Dios, le había revelado, a Abraham, que su seno sería la figura del mismo cielo, Lucas, 16,22, o sea Dios, no trató con Abraham, igual que con otro contemporáneo suyo cualquiera, ahora querido hermano, si Abraham vio el día de Jesús, él vio algo que faltaban muchos años para que se cumpliese, y lo mismo que Abraham, a Moisés, y a David, y a todos los profetas, todos profetizaron la visita, Lucas, 19,44, el tiempo de tu visitación, vino Jesús, a este mundo, Dios, se hizo hombre, y todo esto lo vio Abraham con los ojos de la fe, supongamos, que hoy día, ahí hay un hombre que monta un negocio, las cosas le van bien, y llega un momento que ese hombre su negocio se lo deja a su/s, hijo como herencia, y sus hijos siguen el negocio, y de hijos a nietos, y así va siguiendo ese negocio que un día el abuelo empezó, pero ¿y sí por el contrario a partir del padre emprendedor, las cosas empiezan a ir mal? y el negocio pero el padre emprendedor, una vez que falta, ya no sabe sí su negocio sigue bien o no, y todo se puede ir a pique, con el negocio de Dios, no será así, digo negocio de Dios, porque cuando José y María, buscaban a su hijo lo encontraron en el templo en medio de los doctores, y Él le dijo a su madre, ¿no sabíais que en los (negocios) de mi Padre, Lucas, 2,49, ahí está la figura del Plan de Dios, aquí en este mundo, los negocios de Dios, nunca fallaran, en el mundo que Dios, Creo habrá mucha crisis, en todas las necesidades de la humanidad, hay hambre, hay guerras hay peleas de todas las índoles, y todo esto porque la criatura se aleja de Dios, en el pecado, sin embargo, en el propósito de Dios, hay abundancia no hay peleas, ni guerras ni disensiones, la Obra de Dios, es por Él Espíritu, Zacarías, 4,6, la salvación del pecador, esa es segura, y querido lector, todo está concentrado en la venida de Jesús, a este mundo, y su posterior ida con su muerte, y que Él nos prometió que se iba al Padre, y que allí prepararía un lugar para cada uno de los que creyésemos en Él, ahí se cumplen las promesas a Abraham, por eso Abraham vio el día de Jesús, y ahora viene otra enseñanzas que no la podemos dejar ahí en la cuneta, Abraham vio el día de Jesús, que en su tiempo sería mucho ver, los contemporáneos de Abraham se pondrían las manos en la cabeza de miedo, pero él lo vio, y ahora viene la pregunta que cae por su peso, y que estas pregunta, nos sigue apoyando la preexistencia de Jesús, si Abraham vio el día de Jesús, la iglesia también lo tendríamos que ver, miramos hacia atrás por la fe y vemos allí en el calvario a esa descendencia de Abraham, por la cual nosotros somos salvos, pero una vez visto el día de Jesús, también tendríamos que seguir sus enseñanzas-ejemplo, y mirar hacia adelante como miraba Él, y vio que Él se sentaría en la Gloria, y la iglesia, vemos desde aquí esa Gloria, que Jesús nos dijo, voy a preparar lugar para vosotros, Juan, 14,3, saco, este ejemplo de Abraham, que él, dice vio y se gozó, o seas mirando hacia adelante, porque si miramos solamente como aquel de la parábola de Lucas, 12, cuando aquel hombre se dio cuenta que sus bienes aumentaban, derribaré mis graneros, y los hare más grandes, ese era uno del pueblo de aquellos días, pero y hoy la iglesia, ¿vemos tanto hacia adelante, como hacia atrás? Y ¿Qué quiero decir con esto de tanto mirar hacia adelante como hacia atrás? Cada vez que los cristianos-iglesia, partimos el pan. Hechos, 20,7, estamos recordando algo que sucedió, la muerte de Jesús, y claro, eso sería lo que vería Abraham, porque cuando ahí dice Jesús, que Abraham, vio mi día y se gozó, allí Abraham, no le valía mirar hacia atrás, puesto que la bendición de su descendencia estaba en futuro, ni en presente, ni en pasado, futuro, pero ahora para que los cristianos, veamos lo que vio Abraham, tenemos que mirar hacia atrás, cómo que los resultados de lo que tendríamos que ver en el futuro, serían los resultados de lo que sucedió en el pasado, tendríamos que tener los cristianos cuatro ojos, pero aunque no tenemos los cuatro ojos sí que tenemos un corazón guiado por el Espíritu-Santo, Hechos, 2,4, y Gálatas, 4,6, que seguridad la del cristiano, con el Santo-Espíritu, en nuestros corazones, y ojos, especifiquemos para que no haya malos entendido, no la seguridad del cristianos para las cosas de este mundo que son pasajeras, sino que yo veo ahí la seguridad del cristiano en cuanto a nuestra salvación, ¿Qué Abraham se gozó? También nosotros nos gozaremos, Juan, 16,22, se gozará vuestro corazón, y nadie os quitará vuestros gozo, querido lector-hermano, el gozo producido por el Espíritu-Santo, en nuestros corazones, ¿Quién nos lo podrá quitar? Quien iba a evitar que el pueblo de Dios, cuando Moisés, fue a Egipto, para sacar al pueblo de Dios, de aquel lugar, que alguien se le opusiera, Faraón, dijo que él no dejaría salir al pueblo,¿ y tú quién eres para no dejar que el pueblo salga de Egipto? ¿Quién quitará los resultados de nuestra salvación? Adquirida por la muerte de Jesús, luego, si Abraham se gozó viendo el día de Jesús, ¿Cuánto más nosotros viendo, que Jesús, ya está sentado en la Gloria, y allí estaremos nosotros también con Él? ¡querido hermano¡ ponte la mano en el corazón, ahora y piénsate para ti mismo, como el rico de la parábola, eso que dice Jesús, es verdad, y no pensamos igual que piensan los religiosos, bueno, esperaremos a que lleguemos allí, y haber que pasa, nosotros nos debemos de poner tanto a las alturas de Abraham, como a las alturas del mismo Jesús, Hebreos, 12,1-2, el gozo puesto delante de Él menospreció el oprobio, o seas, Jesús, está pensando ahí, que por lo que a Él le esperaba en la gloria, no tenía ni punto de comparación, del rato tan amargo que a Él le esperaba de pasar, muriendo por los pecadores, Jesús, se pensaba, ¿tengo que sufrir? Sí, porque esa es la voluntad del Padre, pero ¿y los resultados de mi sufrimiento-muerte? La salvación eterna, que cuando ya estemos con Él allí, se acabaron las lágrimas, Juan, 16,20, el lloro-sufrimiento por causa del Reino de Dios, señores, pensemos, en esta preexistencia de Cristo, y lo involucrado que estamos en ella, la iglesia de Jesucristo, somos inmortales, 2ª de Timoteo, 1,10. Y volviendo a la Preexistencia de Cristo, seguimos pensando, en ese vs,57, que razón hay para que el pueblo le responda así, si tiene cincuenta años, como si tienes veinte, lo importante es que Jesús, nos está dando la gran lección de la inmortalidad, pero que Él conseguiría la inmortalidad, con su muerte, y resucitó, a los Corintios, se les hablaba de la resurrección de Cristo, y se ponían muy nerviosos, ¿has visto tú a Abraham tan joven, sí, por las promesas que Dios, le hizo a Abraham, se puede ver mucho más por la fe como veía Jesús, que cuando solamente pensamos en las cosas de este mundo, el que no me falte el pan de mañana, y responde Jesús, ¡no te preocupes¡ Dios, se ha comprometido, a que no nos falte nada, ni en un pasado, ni en un presente, ni en un futuro, Mateo,6,25, y32, ahí lo tienes, Él Creador, cuidando a la criatura, y seguimos, yéndonos a Juan, 8,58, otro piropo, permitirme la expresión cuando un hombre le dice un piropo a una mujer, la mujer se siente alagada, y creo yo que el pueblo, y ahora la iglesia nos tendríamos que sentir alagados, cuando Jesús, nos dice estos piropos, ahora querido lector, descúbrelo, a Jesús, bueno, ¿antes que Abraham fuese yo soy? ¿Qué quiere decir Jesús, con estas palabras? creo yo que nos quiere decir, que cuando Él Padre estaba creando, Él ya estaba allí con Él Padre desde Adán hasta Moisés, en las promesas de Dios, a Abraham, Él ya estaba ahí, siempre, Él estuvo ahí y ahora mira la promesa que Él mismo nos deja, he aquí, Mateo, 28,20, ¿cómo Él se compromete a estar con los discípulos cada día? Es preexistente, y lo mismo que Él se compromete a estar todos los días con nosotros, ¿eso solamente fue para aquellos doce que les acompañaron en su ministerio terrenal? ¿o también es para todos los que creyésemos en Él a través de toda la historia? Púes yo creo que es para todos lo que creyésemos en Él durante toda la historia, mientras que Dios, le prometió a Abraham, que en su simiente serían benditas todas la familias de la tierra, Jesús, nos prometió él Santo-Espíritu, que nos lo mando, Hechos, 2,4, Gálatas, 4,6, y más, ya está Él con nosotros todos los días y todas las horas, cuando pienso en esta promesa, en la preexistencia de Cristo, que Él estará con cada uno de los convertidos-nacidos de nuevos, pienso que mientras que el sumo Sacerdote, una vez al año podía entrar, Hebreos, 9,6-7, entran los sacerdotes continuamente, pero en el lugar Santísimo, una vez al año, 9,7, el sumo Sacerdote, una vez al año, ahora bien, los cristianos podemos entrar, ¿cada día? Y cada hora, ¿al lugar Santísimo terrenal? ¡no¡ al Lugar Santísimo celestial, Hebreos, 10,19, tenemos libertad para entrar en el lugar santísimo, yo creo que ese lugar santísimo no es el lugar santísimo terrenal, sino el lugar santísimo celestial, por supuesto que todo esto es un misterio, inclusos para muchas personas que nos vamos pasando como cristianos, eso de que la Biblia, diga que podemos entrar en el lugar santísimo celestial, puesto que el lugar santísimo terrenal ya no existe, y creo yo que eso de poder entrar en el lugar santísimo, allí donde está Cristo, sentado a la diestra del poder de Dios, mira lo que dice en Hechos, 10,4, tus oraciones y tus limosnas (han subido) ahí tenemos ese camino nuevo, de Hebreos,10,20, ¡no aquel camino viejo que los guiaba al lugar santísimo terrenal, y no una vez al año, Hebreos, 9,7, sino cada día, y sí me apuras cada hora, y todo esto querido lector, forma parte de esa muerte y resurrección de Jesús, que es el porqué de todas las cosas, sigo creyendo que toda esta preexistencia, de que antes de que Abraham fuese yo soy, por un lado, y por otro, mientras los bendecía empezó a levantarse, subir, Lucas, 24,50-51, que se iba para seguir preexistiendo, y cuidado, Él se iba a un lugar que ya había ganado de ante mano por su obediencia, siempre existió, existe y siempre existirá, porque así lo quiere Dios, Él Padre, antes de que Abraham existiera Él ya existía, y ahora, ¿qué podríamos pensar? Cuando Él se presenta como Salvador, cuando Él multiplica los panes, cuando Él cura a los enfermos, cuando Él hace posible lo imposible, dice la Biblia, que tomaron piedras, vs,59, para arrojárselas, es cómo si a ti te detesta el médico una enfermedad, y te pone un tratamiento, y te cura, y cuando te ha curado vas y lo mata, eso que Jesús le pasó con el pueblo en vs,59, fue lo que le pasó al Apóstol Pablo, con los Gálatas, 4,13-16, me he hecho vuestro enemigo por deciros la verdad, vs,15, os hubierais sacado vuestros propios ojos para dármelo, ¿Dónde está esa satisfacción? O cómo le pasó a Moisés con el pueblo, en Números, 21, 4-5, habló contra Dios, y contra Moisés, o seas que basta que le hagas un bien a tu prójimos, para que tú prójimo te responda con una puñalada, y a Jesús, no solamente le dieron una puñalada, sino que lo crucificaron, porque eso de que le arrojaban piedras solamente era un anticipo de lo que le esperaba, que lo mismo que el pueblo dejándose seducir, por los líderes religiosos lo crucificaron, para resucitar de los muertos y preexistir para siempre, Juan, 12,34, y mira querido lector, cómo va terminando esta preexistencia de Jesús, dice en ese vs, 59, que le arrojaron piedras, esa era las normas que ya estaban establecidas desde la antigüedad, por ejemplo en Juan, 8,5, en la ley Moisés, nos mandó apedrear a tales mujeres, o en el caso de Esteban, Hechos, 7,58, lo apedreaban, uno de los máximos castigos, implantados por la ley, Levítico, 20,10, pero gracias a Dios, que aunque lo apedreaban, Jesús, se escondió, y salió, ¿y porque, si lo están apedreando, Él se escapa de ello? ¿Por qué aquellos dos malhechores que crucificaron con Él no se escaparon? Muy sencillos, porque aquellos malhechores, justamente padecían lo que merecían sus hechos, esos dos malhechores, estuvieron colgados, porque se merecían lo que habían hechos, pero Jesús, no hizo ningún mal, ante bienes, Hechos, 10,38, pero el secreto de que Él se escapara, consistía en que su hora no había llegado todavía en el reloj de Dios, Juan, 7,30, y 8,20, esa hora, era la hora de su muerte, y esa hora de su muerte, solamente Él Padre la tenía señalada, y por eso nadie le iba a quitar la vida, Él no moriría, hasta que no llegara la hora de Juan, 12,23, y 27,13,1, y tantas sitas que hay en los Evangelios, de que Él sería muerto cuando Dios, Él Padre lo indicara, ni antes ni después, y exactamente como Él Padre lo tenía programado, no murió porque era un pecador, sino por el pecado, de Juan, 1,29, y tenía que morir como el cordero de Dios, ¿Qué? ¿Que se escapó Jesús, de entre las gentes por su propio capricho? Corriéndole a la muerte, porque no sabía lo que le esperaría después, Juan, 13 ,3, se les escapó a las gentes conforme a la Voluntad de Dios, atravesando por medio de ellos, ¿es posible, qué atravesando por medio? Yo creo que es posible, lo mismo que le fue posible a aquella mujer de flujo de sangre de Marcos, 5,25, aquella mujer sino hubiera sido por la Voluntad-Poder de Dios, nunca hubiera llegado a tocar el manto de Jesús, Jesús, se escapó por en medio de la multitud, esta mujer toco el manto de Jesús, por detrás de la multitud. Resumiendo, hay tenemos la preexistencia de Cristo, Él de siempre, y para siempre, permanece para siempre, Juan, 12,34, pero para permanecer para siempre tuvo que venir, y con su muerte, quitar la muerte, 2ª de Timoteo, 1,10, y pienso ahora, si quita la muerte, tiene que sacar la vida, la vida que le inyecta al alma, y nos convierte en inmortales, pero esto es para los que hemos creído en Él y le seguimos, y nos comprometemos con Él, y tomamos nuestra cruz, Lucas, 27, ¡bueno¡ ahí dice, toma tu cruz y sígueme, pero es que en Lucas, 9,23, toma tu cruz, cada día, Jesús, de cada vez está apretando la cuerda más, no solamente ,toma tu cruz, sino que ahora tómala cada día como yo creo que Él la tomó para hacer posible nuestra redención, bueno, querido hermano-amigo-lector, preexistente con Cristo, y para ser preexistente, tienes que seguir sus enseñanzas, tienes que creer como Él dice, Él pone las condiciones, como cuando vas al médico y te detesta alguna anomalía en tu cuerpo, y te pone en tratamiento, y tú te sometes al tratamiento, que el médico te ha puesto, querido lector, sea quien seas, vale la pena de creer, obedecer, servir a Cristo, para que lo mismo que Él es inmortal, para siempre, que Él también nos haga a nosotros inmortales, estaremos siempre con Él Señor, mira cómo termina 1ª Tesalonicenses, 4,17 estaremos siempre, y eso sí que no habrá nadie que nos lo pueda quitar, nadie las arrebatará, Juan, 10,28-29, las arrebatará de la mano de mi Padre, bueno, ahí está como yo entiendo la preexistencia-inmortalidad, tanto de Cristo como la de todos aquellos que les sigamos, y que Dios, te bendiga. F. Chamorro.